300 personas Sin Techo participan en la paella popular para reclamar el derecho a una vivienda digna
Entidades sociales de la Iglesia han organizado el acto para reclamar a la Sociedad y las Instituciones más recursos y acciones valientes para hacer frente a una realidad de las personas sin hogar que ha empeorado
Unas 300 personas en situación de calle han participado a la paella popular celebrada en el Parque del Mar para reivindicar y sensibilizar a la ciudadanía y a las administraciones sobre la situación de emergencia que sufren hombres y mujeres que, por diferentes circunstancias en la vida, quedan “Fuera de cobertura” y sin acceso a derechos básicos.
Las entidades que forman parte del Área Pastoral Caritativa y Social de la Iglesia ( Fundación Social La Sapiencia; Pastoral Penitenciaria; Proyecto Sojorn; Jóvenes de San José; Pastoral de la Salud; Justicia y Paz y Cáritas Mallorca) han organizado la paella popular este sábado 17 de diciembre, para visibilizar al colectivo Sin Techo y a la necesidad de actuar con medidas valientes a corto y largo plazo para dar respuesta a una realidad que está empeorando a los últimos tiempos.
Jaume Alemany de Pastoral Penitenciaria y Sojorn, ha sido el portavoz de las entidades durante el acto. Ha tomado la palabra para alertar que la situación de las personas privadas de derecho a la vivienda digna reclama con urgencia soluciones inmediatas. “La fuerza de la unidad, de la conciencia colectiva, del apoderamiento del grupo, es una primera pasa para hacer frente a esta problemática que sufren un grupo muy numeroso de personas que no se reduce, sino lo contrario, va creciendo”.
Alemany ha recordado que son muchas y diversas, las causas que hacen que cada día más personas se encuentren en la calle. “No se trata del caso puntual de una persona que ha sufrido un contratiempo, ni la situación ocasional de otro que, debido a haber perdido el lugar de trabajo y no puede pagar el alquiler”. Se trata de la “situación de sufrimiento de muchas personas, familias, que a pesar de tener un trabajo remunerado no pueden hacer frente a alquileres abusivos, ni a las condiciones imposibles que exigen particulares e inmobiliarias para alquilar una vivienda.
En su alocución Alemany ha hablado de la necesidad de hacer pedagogía social. “Responsabilizarnos todos de aquello que acontece y afecta a pocos o muchos ciudadanos. Muchos propietarios que abusan de los alquileres, otros tienen casas cerradas porque no necesitan el alquiler para vivir, otros viven al margen de la realidad que afecta a los otros, … todos tenemos el deber y el derecho de intervenir democráticamente en la construcción una sociedad justa, pagando impuestos, votando, exigiendo a quienes nos representan una gestión eficaz, etc.
El responsable del proyecto Sojorn y de Pastoral Penitenciaria también ha reclamado a las administraciones la importancia de “priorizar la atención a esta problemática en los presupuestos, cambiar cuántas leyes o normativas hagan falta para facilitar soluciones, imaginar nuevas formas de respuestas, acoger iniciativas de particulares o de entidades sociales que ayuden a dar respuestas concretas”
También ha recordado el papel fundamental de la iglesia y de los creyentes “somos el Área de acción social de la iglesia de Mallorca. Por eso nos sentamos en la mesa para compartir. Creemos en la fuerza de la hermandad para hacer frente a la desigualdad, con el acompañamiento personalizado para ayudar a llevar la cruz, cada uno la suya, pero entre todos la de todos. Tenemos que abrir los ojos a esta problemática que está aconteciendo un drama para muchos, ante quienes no podemos restar impasibles.
Jaume Alemany también ha pedido más conciencia colectiva a las personas que representan la sociedad, “de las prioridades que establezcamos, de cómo gastamos el dinero, del uso que damos a nuestros inmuebles, en los alquileres que cobramos de nuestras propiedades, a los sueldos que pagamos a nuestros contratados, en el presupuesto que dedicamos a la solidaridad o la caridad cristiana.
Ha concluido su intervención en la necesidad de aspirar “a una sociedad igualitaria, justa y solidaria”.
Además de las 300 personas que han participar en la comida solidario también han sido presentes el Obispo de Mallorca. Mn. Sebastià Taltavull; la directora de Cáritas Diocesana de Mallorca, Esther Romero; el delegado episcopal de Cáritas Diocesana de Mallorca, Pep Toni Guardiola; la presidenta de la IMAS, Sofia Alonso y los regidores del Ayuntamiento de Palma, Daniel Olivar
Esta comida popular ha completado una serie de actos públicos que se han celebrado en los últimos 3 meses, en la plaza de España lo primero y posteriormente en la iglesia de San Domingo a Inca y de San Miquel de Palma para poner el foco a la situación de urgencia de estas personas que quedan al margen de la sociedad y de los derechos básicos.
Apuntar también que el área para la Pastoral Caritativa y Social de la Iglesia de Mallorca se trabaja conjuntamente a través de diferentes servicios y que en el último año ha dado cobertura a aproximadamente unas 852 personas que están en situación de calle y que sufren varias realidades como son la problemática de salud mental, personas que salen de permisos penitenciarios y que no tienen un hogar; personas mayores de 65 años con dependencia que no pueden acceder a una residencia pública o privada; y de familias enteras que no pueden acceder a una vivienda por culpa de un incremento del precio de la vivienda y la inflación entre otras causas.